jueves, 19 de octubre de 2006

La conferencia y la novia extranjera

A la semana siguiente mi jefe me pidió que diera una breve charla sobre mi trabajo en España y sobre qué pretendía hacer aquí. Por supuesto que acepté, ahí estaba yo reciclando mis conferencias y trabajos y completando datos y resultados.


La mañana de ese martes la empezamos mostrando a mi grupo americano mis intenciones. La cosa duró algo menos de una hora, tiempo en el que les expliqué lo que yo hago y en lo que estoy interesado. Tengo que decir, aunque esté feo, que salí muy contento de la charla. Logré vender bien mi producto. De hecho mi jefe de aquí cambió de opinión (la semana anterior me había comentado que lo que pretendía hacer era complejo y quizás no muy útil, que se podía intentar hacer mediante otras técnicas más sencillas) y me dijo que le había impresionado y que el proyecto era muy ambicioso. Podría ser difícil y largo, que tres meses no iban a ser suficientes, pero que claro que lo íbamos a intentar. Me comentó también que tengo un inglés británico (supongo que eso lo notan los norteamericanos). El profesor de Madrid me dijo que mi trabajo era "robusto" y estaba bien construido, con bastante lógica científica. Y uno de los becarios me comentó que había sido una charla muy buena, que se había enterado de casi todo y que, para ser extranjero y a pesar de mi acento ligeramente español, me había explicado muy bien y de una manera bastante clara. Así que de lujo todo.


Pero, para variar, no todo iban a ser cosas buenas, faltaría más. Como ya he adelantado en anteriores artículos, la relación con la casera iba de mal en peor. Recordamos que me había hecho pagarle otro mes más porque supuestamente no le había llegado la transferencia que le hice a primeros de septiembre. A mí me era ya indiferente, aunque es cierto que me causó bastantes agobios y dolores de cabeza, pero yo no iba a pagar ni un duro más. Mi banco decía que el dinero se había entregado y yo tenía todos los recibos. Recuerden ustedes también que no tenía agua fría en la cocina. Pues bien, un señor vino a arreglarlo, y sin problema. Menos mal que apenas le hablé ni le di datos de mí, porque, iluso yo, al día siguiente mi casera me mandó un mail donde aparecía lo siguente:

"Now Alberto this is important: I told him that you are my boy-friend because if he knows that you rent the place then he will charge you a deposit fee and that will be very high (about 1000.00$). So the best is to say nothing and if he asks just say you are my boyfriend from Spain."

(Ahora Alberto, esto es importante: Le dije a él -al que me arregló el agua- que eres mi novio porque si se entera de que estás alquilando el piso te hará pagar un depósito a modo de fianza que será muy grande (sobre 1000 dólares). Así que lo mejor es no decir nada y si él pregunta dile simplemente que eres mi novio de España)

Yo lo flipaba. No salía de mi asombro. ¡¡¡Qué tía!!! Así que yo era un realquilado y además me acababa de salir una novia americana-austiaca así de repente. Aquello ya sobrepasaba el límite de mi paciencia. Era demasiado fuerte. Le había pagado casi 1800 dólares y encima era un realquilado y me tenía que hacer pasar por su novio. Le contesté lo siguiente:

"Hallo Elisabeth,

Yes, all in the apartment is going good. However I do not feel very comfortable with this rent situation. I think that you should have said it to me before. I am starting to think that you have actually been playing with me. Anyway, I will say nothing and if somebody asks, I will just say that you are my girlfriend. Everything is going to be ok."

(Hola Elisabeth. Sí, todo en el piso va muy bien. De todas formas, yo no me siento muy agusto con esta situación de alquiler. Creo que tú me lo deberías haber dicho antes. Estoy empezando a pensar que realmente has estado jugando conmigo. De todas formas, no diré nada si alguien me pregunta, simplemente diré que eres mi novia. Todo va a ir bien).

Mano de santo. Al día siguiente me escribió ofendida y diciendo que ella era una buena persona, que tenía referencias y que le gusta ayudar a la gente. Que si dudaba de ella que preguntara a gente del departamento. A mí aquello me parecía muy bien, pero ¿a que no saben lo que pasó? En efecto, misteriosamente ese mismo día apareció la dichosa transferencia:

"Hi Alberto,

I have great news!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! I just found out that your bank has wired the 730$ into my savings account rather than checking account and that is why it did not show up on my checking account statement which I kept checking. So I am very happy for both of us.

So the money is here and you are good for the month of September plus the 4 days in December and the month of October!"

(Hola Alberto, ¡tengo magníficas noticias! Acabo de descubrir que tu banco me ha enviado los 730 dólares a mi cuenta de ahorro en lugar que a mi cuenta corriente y por eso no aparecía el dinero en la cuenta corriente que es la que yo he estado mirando. Así que estoy muy contenta por nosotros dos. Así que el dinero está aquí y ya has pagado septiembre, 4 días de diciembre y el mes de octubre)

Encima la culpa era de mi banco. Yo en eso momento decidí pasar al modo diplomático. Le respondí que no era mi intención haberla herido y que comprendiera mi situación, que le había pagado un montón de dinero, que tenía mucho trabajo en la Universidad, que estaba cansado por el jet lag etc. y que me alegraba que todo se hubiera solucionado. Para mis adentros pensaba, y pienso, todo lo contrario. Es una hija de la gran California y me ha engañado, aprovechándose de un simple estudiante de doctorado extranjero. Pero eso daba ya igual. Sucede que, de nuevo, vuelvo a ver cómo a veces hay que ponerse borde y ser maleducado porque si no, no consigues nada. No bastan las buenas palabras y los buenos modos.

Por lo demás esa semana estuve solito. David se iba a comer con su familia, porque ya estaban a punto de volver a España. El miércoles fuimos a cenar al puerto, para despedirlos, a un restaurante típico americano. Calamares rebozados, unas almejas riquísimas, algo de comida mexicana y cacahuetes a discrección. Me gustó.

Vista nocturna del Océano Pacífico desde el Puerto de Santa Bárbara

El fin de semana apenas salí de casa. El sábado descansé y el domingo no paró de llover. Así que a disfrutar de películas y series en el portátil. Me estaba empezando a adaptar aunque aún no estaba del todo agusto. Seguía queriendo volverme a Europa, en los Estados Unidos todo era muy raro. Para el cambio de opinión había que esperar a la semana siguiente...

3 comentarios:

Pilikina dijo...

Parece que se van arreglando las cosas, no?
Descubrí tu blog por casualidad, sigue contandonos cosas de por allí.
Por cierto, cual es el proyecto que tienes entre manos?

Clausius dijo...

Bueno, no sé hasta qué profundidad me preguntas, pero quiero usar la Resonancia Magnética Nuclear de 29Si para estimar distancias entre Si-O-Si que me aporten datos estructurales de mis materiales. Si tienes más interés, en la sección de enlaces del blog tengo publicados mis artículos, en español y en inglés.

Saludos y gracias.

Anónimo dijo...

Paisano lo de tu proyecto suena muy muy complicado. Suerte con la casera, yo tengo unos "landlords" italianos que son lo mas chorizo que te puedes echar a la cara, pero bueno, es normal que te intenten estafar, al fin y al cabo somos guiris en esta tierra;)
Saludos desde la costa este y suerte con todo.